HÁGASE LA LUZ

El invierno en Aviemore se hace terriblemente largo, los días de oscuridad y tinieblas se suceden, y la primavera aún no ha dado señales de vida.Las horas de luz empiezan a alargarse, lentamente, pero la temperatura sigue siendo bastante fría, y la lluvia y la nieve, son compañeras de viaje frecuentes.
Mi actividad frenética no se detiene, a pesar de las adversidades,pero debo adaptarme  a las circunstancias, irremediablemente.Mis jornadas ciclistas se reducen de forma notable, y los días en el gimnasio corriendo en la cinta, haciendo remo, bici o elíptica,son algo habitual, todo sea por mantenerme en buena forma, de cara  a la primavera-verano.El gimnasio no me gusta demasiado,no es mi hábitat natural, pero es una opción interesante en algunos casos, mejor que nada, desde luego.
Después de dos semanas de nieve, frío y tiempo desapacible, por fín, un día soleado, aunque sea un sol temeroso y discreto, que sabe a gloria por estas latitudes.Es el momento perfecto para desempolvar mi bici y rodar un par de horas bajo este cielo casi despejado.Este oasis en el desierto, no sé lo que durará, así que raudo me visto, y a disfrutar! .Este corto paréntesis eleva mi estado de ánimo a cotas inimaginables, y me llena de energía para varios días.Aún no me creo, sol !!!!!!
El reloj apremia, es hora de ducharse, cambiarse y volver a la rutina.La  felicidad se refleja en mi cara, y empiezo otra jornada laboral con la moral por las nubes y una sonrisa reveladora.
Mañana ( o posiblemente en unas horas ) la oscuridad volverá a reinar por estos parajes, y el astro rey quedará como un vago recuerdo en mi retina, pero su efecto  renovador perdurará.
El regreso de la nieve dificulta sobremanera mis planes, pero el gimnasio me ofrece un pequeño "refugio" entre cuatro paredes tristes e impersonales, algo es algo, asumo resignado.
Sólo queda esperar que el tiempo de una tregua, y algún rayo de sol vuelva a dibujar una sonrisa en mi rostro.Mientras tanto, pensaré en ese efímero momento de luz y calidez, en la tierra de la oscuridad.
Hágase la luz, me repito a mí mismo, con la esperanza de obtener respuesta !
El periodo invernal, aunque parezca interminable, antes o después llegará a su fín , y debo estar preparado.Los días de frío y de sufrimiento "bajo techo" darán su fruto, cuando el verano

se digne a visitar el lugar.Una vez más, repito "hágase la luz" ,cómo un grito en el vacío.

Una vez más, sin dolor, no hay recompensa...

SEE YOU ON THE TRACKS !!!!!!!!!!