Un par de "problemas" han enturbiado mi plácida vida de los últimos meses.En primer lugar, un malentendido con un amigo, provocó un clima de tensión, que me incomoda enormemente.Para mí no es agradable soportar esa tensión diaria, que me hace sentir mal y afecta sobremanera a mi estado de ánimo, ya de por sí un tanto delicado.
Por suerte, la situación ha ido a mejor, pero reconstruir una relación de amistad deteriorada no es tarea fácil, y existe la posibilidad de que nada vuelva a ser como antes.
Y por último, y sumado a lo anterior, un "problema" de otra índole ha terminado de rematar la "faena".
En las últimas semanas, un mal me persigue, de difícil y lenta curación.Mi frágil equilibrio emocional ha sufrido un duro varapalo,y aunque lucho a diario por recomponerme, no me resulta sencillo.Intento olvidar y vivir el día a día,sin éxito.
Los males del corazón no se curan de un día para otro, y la única medicina efectiva es el paso del tiempo.Las heridas físicas pueden sanar rápido, pero las del alma tienen un pronóstico "reservado".
Supongo que es una prueba del destino, que me hará aún más fuerte.
En pleno periodo de "recuperación" ( con recaídas ) ,debo asumir que la vida sigue y tengo que enfocar la situación de otra manera.Quizás no es un "problema" irreversible, y el tiempo se ponga de mi parte, quizás...
Ahora lo único que puedo hacer es mostrar entereza y distraer mi pensamiento,para no pensar en aquello que me cause dolor.
Nada mejor que salir en bici en un día desapacible y frío, y exponerme a los elementos,buscando una especie de "redención".Nada más llegar, necesito una buena ducha caliente ,no siento las manos del frío, y me paso un buen rato tiritando, hasta que entro en calor.En comparación con esto, los problemas sentimentales parecen un juego de niños...
Ha sido una terapia de choque, un tanto radical, pero en mi caso, satisfactoria.
Por si fuera poco, al día siguiente, aprovechando otra jornada invernal y gélida, me dispongo a hacer una de mis míticas sesiones de trail-running, alrededor del lago An eilein.Bajo una lluvia incesante,rodeo totalmente el lago, por un sendero, que me lleva hora y media de arduo esfuerzo.Llego a casa, reventado, pero con una paz interior muy grande.Por un momento, ya ni recuerdo lo que me pasaba...
Otra buena idea es visitar a dos buenos amigos, en una población cercana, aprovechando que tengo el fin de semana libre, desconectar de todo y dejar atrás mis pensamientos negativos y recurrentes, que no conducen a nada,tan sólo a frustrarme aún más de lo que estoy.
De paso, tambien haré dos buenas rutas en bici, y conoceré el ambiente del lugar.Sobre el papel, un plan perfecto.
De vuelta, he cumplido mis objetivos, he pasado dos días en magnífica compañía y conseguido olvidar ( sólo en parte ) los "males" que me acechan.
La terapia de choque parece que funciona, y a mi manera, poco a poco me siento mejor.
Supongo que habrá otros "métodos" más llevaderos, pero soy un tanto masoquista... La cultura del dolor y del esfuerzo me va mejor.
Las vacaciones se acercan, y con ellas, el fin de todos mis males, o eso espero.
Ahora voy a pensar en un lugar cálido y soleado,lejos de aquí ( mi pueblo natal, por ejemplo ) y
dejaré que el tiempo actúe, la vida sigue...
En plena convalecencia,forjaré mi carácter de acero, y trataré de aprender la lección,aunque el ser humano es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra ( en mi caso, más de dos ).
Me pondré en manos del tiempo, y me dejaré llevar...
Por suerte, nunca es tarde ,la vida sigue...
SEE YOU ON THE TRACKS !!!
