Los dias de frio y de poca luz ya quedaron atras,definitivamente enterrados,hasta el proximo otoño,que se vislumbra lejano en el horizonte.Lo que toca ahora es un calor abrasador,que irrumpe con fuerza.Las temperaturas han subido de forma subita,incluso varios grados por encima de lo habitual en estas fechas,cosas del cambio climatico,o quizas se deba solo a ciclos del clima.
Las nieves perennes de Sierra Nevada aguantan trabajosamente,frente al poder del astro rey,y en semana santa,una gran cantidad de nieve aun tapiza el macizo.Ha sido un año pleno del blanco elemento,lo que asegura el disfrute del esqui hasta bien entrada la primavera.
En mi calendario asoman varias carreras de montaña,alla por mayo y junio,que me permitiran conocer nuevos lugares y mantenerme motivado de cara al verano.
Procuro alternar mis salidas ciclistas con tres dias a la semana de running,para llegar en buena forma a dichas carreras,pero tambien para desconectar del intenso trafico y del estres que me persiguen cuando estoy a lomos de mi "flaca".Mi ultima salida en bici me condujo hasta pasado el pueblo del Padul,por una carretera que antaño fue general y ahora es una carretera secundaria,no exenta de trafico.Recorri parte de la vega granadina,y llegue al pueblo de La Malaha,para alcanzar el citado pueblo.La vega se muestra ahora en todo su esplendor,rebosante de vida y de un color verde intenso.Justo es el periodo de recoleccion de las habas,lo que indica que la primavera llego para quedarse.
De vuelta a la capital,me dirijo a los pueblos que se asientan en la falda de la sierra,pero estan geograficamente en la vega.Paso por Otura,Dilar,Gojar,La Zubia y Ogijares,pueblecitos muy bonitos y con un cierto aire serrano,que me encanta,a pesar de estar a escasos quilometros de la urbe.
Conforme me aproximo a Granada,sobre todo a partir de Ogijares,esas sensaciones desaparecen y me veo envuelto de nuevo en una maraña de trafico,humo y de estres en grado superlativo.
Las obras del metro convierten el paso por el Zaidin,el barrio de entrada a la capital, en un absoluto caos, (calles cortadas,desvios provisionales,transito de camiones,etc)
Una pesadilla en toda regla.Cruzar el barrio me sumergue en una lucha sin cuartel con los autobuses urbanos,las motocicletas y los coches,en plena hora punta y sudando a raudales,axfisiado por el humo de los vehiculos que me rodean,una locura !!! Me pregunto por que se me ocurrio regresar por este sitio,diosssssssssss
Todas las buenas sensaciones que tenia solo unos minutos antes ,se transformaron en ansiedad y en ganas de llegar a mi destino sin dilacion.
Que duro es ser un urbanita,creo que nunca me acostumbrare,no me veo el resto de mi vida inmerso en un paisaje de cemento,de vehiculos y aglomeraciones humanas.
Al dia siguiente,hastiado de este panorama,decidi correr y "castigar" a mi bici sin salir.Por la noche es el momento ideal de darle a la zapatilla y evadirme de todo.Sali al lado del parque de casa,y me encamine a la escasa vega que sobrevive al afan inmobiliario,entre Granada,Peligros y Pulianas.Nada espectacular,pero a mi me parece un pequeño oasis en medio del desierto.Cuando corro en plena vega,siento como la temperatura baja un par de grados y el fresco me corta la cara,que sensacion mas placentera.Disfrutar de un poco de soledad,y adentrarme a oscuras por caminos rurales,lejos de los focos de las grandes avenidas y del trafico rodado,increible!
Lamentablemente,lo bueno dura poco,y de vuelta a casa,el leve aumento de temperatura y las potentes luces al fondo del boulevard,me indican que vuelvo al mundo "urbanita".Al menos por unos minutos crei estar atrapado en un lugar autenticamente campesino,algo es algo.Creo que valio la pena,aunque fuera efimero.
Despues de recorrer el centro de la ciudad en bici,sorteando peligros de todo tipo,y a pie,esquivando gente por todos lados,es una bendicion patearme algun rincon desertico.
Definitivamente,me autoconvenzo de que la ciudad no es para mi,jejejeje.
SEE YOU ON THE TRACKS
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