En mi estancia escocesa,lo que marca la tonica del discurrir de los dias es una rutina que no me deja "vivir",despues de mas de un año por estas tierras,descubrir nuevos paisajes y sensaciones es mas que complicado.Mi sed de aventura quedo saciada momentaneamente durante mi ruta por el norte escoces,y el eco de mi andanza aun perdura en mi interior.Sin embargo,tras mi "gesta",mi espiritu errante se intensifico aun mas, si cabe.
Quiero dejarme llevar a donde me conduzcan nuevos caminos y territorios,adentrarme mas "alla" de lo conocido y sorprenderme a mi mismo a cada golpe de pedal.
El misterio de lo nuevo es un aliciente que me impulsa a continuar aqui.
Durante un mismo dia,paso de querer abandonar este pais de inmediato,a desear con todas mis fuerzas penetrar en sus bosques y lagos,hasta el ultimo confin.Son las dos caras de la moneda,que cae de un lado u otro,segun el momento.
Hastiado de tanto asfalto,de llanuras insulsas y de "civilizacion",en los ultimos dias me dedique a probar nuevos senderos,que me sumergan en el corazon salvaje de las Cairngorms.
Es una loteria de veredas y pasos de montaña,que merece la pena jugar.
Con esta intencion,me dirijo camino del lago Insh y tomo el desvio de Glenfeshie,para alejarme de todo y sentir el abrazo de la naturaleza en su estado mas puro.Despues de unos quilometros de asfalto,un paisaje de ensueño se abre ante mi,un valle teñido de color violeta,un rio caudaloso y la inmensidad de las cumbres al fondo.Un paso de montaña,se abre camino entre moles de roca,en un continuo subir y bajar,que surca la cordillera y pone mi bici al limite de sus posibilidades,echando en falta una autentica mountain bike.El viento azota con fuerza,y acaba con mis escasas energias,tras cuatro horas de pedaleo.La proxima ocasion intentare seguir explorando este paso sobrecogedor.
En el camino de vuelta,me percato de un sendero que cuelga de la montaña y sube hasta las alturas,otro reto pendiente.
Al dia siguiente,aun con fatiga en mis piernas,decido escalar hasta la estacion de esqui,en una jornada horrible de lluvia persistente y frio,en agosto! Una vez alcanzada la base de la estacion,me propongo continuar por el sendero que asciende hasta la cumbre,en una sucesion de curvas de herradura y porcentajes demenciales.El suelo es my irregular y la lluvia forma una pasta resbaladiza,que me impide avanzar con soltura.El barro se adhiere a mis estrechas ruedas como pegamento extrafuerte.Por momentos me veo haciendo eses para esquivar las continuas roderas del camino,y evitar poner pie a tierra.
El descenso es peligroso y requiere de toda mi concentracion.En la estacion de esqui,el termometro marca unos gelidos cinco grados,y mi cuerpo nota los efectos de la lluvia y el frio.Tras 2horas y 30 minutos de pedaleo,llego tiritando y totalmente mojado,con la necesidad imperiosa de una ducha caliente que me devuelva a un estado "normal".
Por tercer dia consecutivo,pruebo nuevos caminos,y me alejo de la carretera y el trafico.En esta ocasion alcanzo el lago Garten y su "hermano" pequeño ,el lago Mallachie,en una jornada pasada por agua,para variar.Mi espiritu se ve premiado al contemplar una manada de ciervos que pastan ajenos a todo,en la penumbra del bosque.Me siento feliz!
A mi paso por Boat of Garten,en una lucha desesperada contra el reloj,decido tomar el sendero que me llevara hasta las inmediaciones de Aviemore,y evitar el temido asfalto.
Con las ultimas luces del dia,llego al centro urbano del pueblo,con el tiempo justo de parar en el supermercado,y deleitarme con algun capricho que me reconforte.
A mi alredededor nada cambia,hay que provocar los cambios.Aunque sea recurriendo a la epica,un "poco" de epica.
SEE YOU ON THE TRACKS
miércoles, 25 de agosto de 2010
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